Cuatro jornadas de capacitación en dendrología y anatomía de la madera, se llevaron a cabo desde el 25 de noviembre del 2019 al 14 de marzo del 2020 para la identificación de especies forestales. La capacitación fue realizada por PROAmazonía y se desarrolló con funcionarios del Ministerio del Ambiente (MAE). Esta serie de talleres permitió el fortalecimiento de las capacidades de verificadores, asesores y personal técnico de la Dirección Nacional Forestal y de las Direcciones Provinciales de todo el país. Así también, contribuyeron al Proyecto Sistema Nacional de Control Forestal (PSNCF) que contempla el manejo sostenible del bosque articulado con la planificación territorial local y nacional.

El PSNCF se encarga de controlar la movilización de productos forestales, en toda la cadena de valor, desde el aprovechamiento en campo de especies maderables, su movilización y comercialización en centros de destinos finales; así como, apoyar al control del tráfico de vida silvestre y sus elementos constitutivos. Por tal motivo, resultó fundamental que el personal encargado de realizar estas tareas profundice sus conocimientos y refuerce sus habilidades. “Estamos aprendiendo sobre las características morfológicas de la madera, organolépticas. Diferenciamos hojas, cortezas, tallos, entre otras. Elementos muy importantes para la identificación de especies económicamente rentables en la Amazonía”, manifestó Mabel Criollo, Especialista Forestal, responsable de la oficina técnica de Lago Agrio.

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Un total de 140 técnicos del Ministerio de Ambiente del Ecuador, participaron en las jornadas de capacitación, divididos en grupos, para asegurar metodológicamente el aprendizaje. En total fueron 384 horas de capacitación. El módulo dendrológico se impartió dentro de la reserva privada Jatun Sacha, administrada por la fundación del mismo nombre, mientras qué, el módulo de anatomía de la madera  se desarrolló en una hostería ubicada en la parroquia de Misahuallí, cantón Tena, provincia de Napo.

La capacitación dendrológica abarcó 53 especies maderables y no maderables, y se realizó una revisión de la organografía vegetal y de la clasificación botánica. Además, se detalló las características dendrológicas de las especies forestales maderables y no maderables, entre las que constan: la base del tronco (raíces tablares, zancudas o ausentes), corteza externa e interna (presencia de exudaciones, texturas), forma de copa y ramificación, tipos de hojas (tipo, posición, forma), tipo de inflorescencia y frutos.

“La identificación correcta de las maderas sirve para verificar en los controles que hace el Ministerio del Ambiente, que maderas transitan en carretera. Hay maderas que son de gran importancia económica que tienen mucha demanda a veces poca abundancia, entonces hay la necesidad de identificar esas maderas correctamente, para saber que especies se están transportando por el país”. Sostuvo Walter Palacios, instructor de la capacitación. Para la sección anatómica se revisaron 29 especies maderables, en la cual los participantes pudieron conocer los caracteres organolépticos (textura, color, sabor, olor, tipo de grano, entre otras) y anatómicos de las maderas (poros, radios, parénquima y porosidad), usados en la identificación macroscópica, y visualizados en fotografías macro y microscópicas, láminas y muestras de maderas.

Este proceso de capacitación buscó ser fundamentalmente inclusivo, en él 38 mujeres participaron activamente, lo que garantizó que el mismo incorporara adecuadamente criterios de género en el manejo de los recursos forestales, haciendo visibles conocimientos diferenciados y la necesidad de que sus intereses, necesidades sean tomadas en cuenta en espacios de decisión. La actividad forestal ha sido tradicionalmente liderada por hombres, iniciativas como ésta buscan que, a más de aportar a la disminución de brechas de capacidades, visibilizar del rol que las mujeres tienen como actoras clave en el ámbito forestal, tanto en el control, verificación y programas de aprovechamiento, fortaleciendo de esta manera la gestión del Ministerio.

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La capacitación es un paso importante, al cual deben sumarse algunas acciones complementarias que se están llevando a cabo, por ejemplo: la elaboración de listados regionales de especies, cuya identificación es obligatoria para todos los actores involucrados en la gestión forestal; la asignación de un nombre común oficial a cada especie aprovechada; el desarrollo de procesos de capacitación contínua en dendrología y anatomía de la madera; la corrección de los nombres científicos de las especies en el Sistema de Administración Forestal (SAF); la reformulación de algunas normas procedimentales relacionadas a la actualización de nombres científicos; y la dotación de equipos básicos de trabajo como binoculares, lupas, muestras de xiloteca y guías ilustradas para la identificación, entre otras.

El Ministerio de Ambiente MAE a través de PROAmazonía trabaja para empoderar y capacitar a los trabajadores de esta entidad para reducir la explotación ilícita de madera a nivel nacional y contribuir a una adecuada gestión del patrimonio natural del país.